Imágenes y palabras de Etiopía 106. Referencias de la antigüedad.

 

Había localizado referencias de Etiopía en la Odisea y en la Eneida. Las más abundantes correspondían a la Biblia. Y esas referencias a Etiopía eran, evidentemente, referencias a Axum. No eran demasiado concretas y confirmaban que se trataba de un territorio con rasgos legendarios cuya ubicación caía en claras contradicciones o simplemente en las leyendas, como aparece en el libro IV (480-484) de la obra de Virgilio, con tonos poéticos y épicos:

Cerca de los confines del Océano, donde se pone el sol, está Etiopía,

el país más remoto de la tierra, donde el enorme Atlante

hace girar sobre sus hombros el eje del cielo

constelado de luceros radiantes.

Heródoto era el mejor informado y lo situaba en el Alto Nilo. Plinio el Viejo, en relación con el mito de Andrómeda, le asignaba la zona de Jaffa o Fenicia.

Era un gran imperio poderoso cuya grandeza había alcanzado a reinos muy distantes. Cuando el profeta Sofonías (que profetizó en tiempos de Josías, 640-609 a.C.), en la sección II, 12, de su libro, “Contra las naciones”, nombra a los enemigos de Israel, ese enemigo del sur es Etiopía: “También vosotros etíopes:/ víctimas de mi espada serán ellos”. Vuelve a referirse a este país en la sección IV, 9-10, “Promesas”: “Yo entonces volveré puro el labio de los pueblos,/ para que invoquen todos el nombre de Yahveh,/ y le sirvan bajo un mismo yugo./ Desde allende los ríos de Etiopía,/ mis suplicantes, mi dispersión,/ me traerán mi ofrenda.” Etiopía era uno de los confines del mundo.

En muchas ocasiones aparecía en la Biblia asociada a Egipto, como territorio fronterizo o más allá de sus límites, como en el libro del profeta Ezequiel, 29, 10- “Hasta Siene, hasta las fronteras de Etiopía”- o en su tercer oráculo, 30, 4-9:

Vendrá la espada sobre Egipto, y la angustia sobre Etiopía, cuando caigan los muertos de Egipto y sean apresadas riquezas y destruidos sus cimientos/… aquel día partirán mensajeros en navíos de mi parte, que irán a esparcir el terror en la confiada Etiopía y serán presa de la angustia cuando venga a Egipto su día.